Este gran poeta, que inducido por los partidarios de Bruto estuvo presente en la desgraciada batalla de Filipos, y que no tuvo valor bastante para afrontar los peligros que habria que sufrir en ella, huyendo despavoridamente como lo dice, relicta non bene parmula, aplaudiéndose á sí mismo; privó tal vez de que se hubiera visto sacrificar uno de los más grandes génios de Roma en aquella sangrienta batalla. Amparado despues por los vencedores y llegando á obtener la confianza de Mecenas-el favorito del emperador Augusto-y amigo del inmortal Virgilio, tan gran poeta como él, se entregó al estudio completo de los autores Griegos-y llegó á producir las obras inmortales que honrarán, mientras exista buen gusto, su nombre, y que llegarán hasta la más remota posteridad. En sus Odas emplea todos los tonos-desde el lírico hasta el festivo; y siempre con igual felicidad, sabe tan pronto interpretar á Píndaro como á Anacreonte, como dice bien un poeta Inglés : << Here Happy Horace << Tune the Ausonian lyre, << Too sweeter sounds << And temper's Pindar's fire.»> Y en las sátiras, género que habia cultivado anteriormente Lucilio le sobrepasa en todos sentidos. En sus Epístolas á los Pisones, es donde verdaderamente descuella todo el génio de Horacio -y será siempre un fecundo manantial de juiciosos estudios. La sublimidad de conceptos, la sutileza y gracias-las formas sencillas y naturales que predominan en las obras de Horacio, unidas á sonoras cadencias y elegancia en el estilo-dan un mérito extrordinario y enaltecen sus producciones,-las que nunca serán bien ni bastante alabadas-haciéndose imprescindible el estudio de las inmortales obras de ese gran poeta para todos aquellos que desean beber y tambien inspirarse en las buenas fuentes de la literatura. Ovidio, el desterrado de Roma por Augustocultivó tambien con gran génio la poesia, y todas sus composiciones son en estilo elejiaco-ménos las Metamorfosis; distinguiéndose por la pureza de diccion y por la elegancia de las formas, aunque en el fondo de algunas de sus obras resaltan con demasiada prodigalidad y ligereza, cantos licenciosos que pecan por falta de urbanidad y de moral. Sus Heroidas, Los Fastos, Los Tristes, Los Amores y Los Pónticos, están escritos con dulce y sonoro verso, y aunque en algunos momentos es monótono, suple á este defecto el encanto de la diccion. VII Pero entre todos, el que sobresale como poeta eminente y de la misma talla de Homero, es el inmortal Virgilio, el Cisne de Mántua. El insigne autor de las Eglogas y de las Geórgicas, verdaderos cuadros en que se dibujan con maestria y arte, la poesía bucólica y didáctica-tambien pulsó la lira con entonacion épica, y su Eneida en nada es inferior á la Iliada ó á la Odisea, pudiéndose decir que en el sentimiento y en las gracias y ternura, sobresale á Homero; y como dice Quintiliano, se halla en Homero un génio más vasto y más elevado, y en Virgilio más arte y mayor trabajo. Y como dice un autor moderno, Virgilio ha introducido en la poesía antigua ciertos sentimientos desconocidos hasta entónces. Las gracias tiernas y dulces, la pasion íntima y contenida, una conmiseracion por todos los pesares y sufrimientos, toda llena de humanidad, es lo que el Cisne de Mántua tiene de superior á Homero. Las bellezas de ese famoso poema en que se describen con mágico pincel los trabajos que experimentó Eneas despues de su partida de Troya, hacen de indisputable mérito, de un inmenso interés y de un precioso estudio, esa obra clásica de los tiempos antiguos. La más alta empresa á que el génio poético puede aspirar, es llegar á interesarnos, á conmover nuestros afectos y pasiones, y excitar el alma por medio de heróicas descripciones, afectuosas, tiernas ó patéticas, y esto se encuentra en las obras de Homero y Virgilio. Cantar con sonora trompa los hechos dignos y grandiosos; adornar con magia y arte el interés del drama que se desenvuelve en el plan del poema; hacer resaltar los principales caractéres que juegan un rol importante en la descripcion de la narracion; pintar con mágico pincel escenas tiernas, majestuosas y conmovedoras, y que todas se liguen entre sí y formen cuadro, cuyos detalles no desdigan la certidumbre de la historia ni su verosimilitud, formando un conjunto en que todo se halle bien armonizado y |